México es el segundo mercado más grande de América Latina en la industria farmacéutica y es un importante productor de medicinas de alta tecnología. Las empresas mexicanas del CFM están bien posicionadas para aprovechar las oportunidades de expansión, ya que su presencia en casi 50 países se debe a su alta tecnología, capacidad innovadora, un amplio espectro de usos terapéuticos de sus productos y un alto nivel de compromiso y ética con los pacientes.

Para el año 2020, el consumo en México de los productos de la industria farmacéutica se habría duplicado respecto del mismo del año 2010. El sector farmacéutico mexicano se enfoca a la investigación, desarrollo, producción y comercialización de productos químicos o biofármacos utilizados para la prevención o el tratamiento de enfermedades, tales como antibióticos, antiinflamatorios, tratamientos contra el cáncer, vacunas, anti sueros, vitaminas y las preparaciones farmacéuticas para uso veterinario, entre otros.